Amigos:
Ante las repetidas declaraciones, esta semana, de altos funcionarios del Ministerio de Energía y Minas, "desmintiendo" la existencia del proyecto de mutilar Bahuaja-Sonene, creo que es justo concluir que ganamos la batalla.
Alegrémonos todos, por la manera generosa y lúcida en que miles de personas y decenas de organizaciones peruanas y extranjeras se pronunciaron y esforzaron por salvar uno de los últimos santuarios de nuestra vapuleada madre Tierra, en esta época oscura cuando la codicia y la soberbia justifican todo sacrilegio. Siento orgullo por el rol activo y responsable del Grupo de Trabajo de la Sociedad Civil para la Interoceánica Sur, el colectivo al que pertenezco; así como el colectivo de ANP e Hidrocarburos, que aportó información y cabildeo fundamentales. Un reconocimiento muy especial a los ciudadanos de Puno: el Grupo Regional Interoceánica Sur, el Grupo Carabaya y las autoridades locales y regionales. Sé que en Madre de Dios también se dio una importantísima movilización ciudadana. Y qué labor crucial, dignísima, han cumplido los comunicadores sociales y periodistas, cuán orgullosos merecen estar Uds. de vosotros mismos.
Pero debemos mantener plena conciencia de que este es solamente un incidente, aunque auspicioso, en un proceso donde, en general, las cosas no pintan nada bien para la naturaleza ni para el ser humano. Enfrentamos visiones de mundo cortoplacistas y retrógradas, voluntades sostenidas por enormes capitales y por la tradición autoritaria que corroe nuestra patria. No basta entonces con pelear batallas, sino que precisamos respirar hondo y prepararnos para una larga brega. Una brega que debe ser muy lúcida y tan solidaria como ha sido esta campaña por el Candamo. Seremos sometidos a escrutinio: deberemos justificar con razones y cifras el valor de las áreas protegidas, desnudar los mitos del modelo económico propuesto, robustecer el contenido humanista de nuestros valores y de nuestras acciones, proponer sólidos términos de interlocución y aportar caminos de salida de la desigualdad socioeconómica y de la destrucción ambiental que la acompaña. Debemos (quizá es lo más difícil) predicar con el ejemplo.
No desmayemos, no nos distraigamos. Tenemos una agenda severa por delante. Cordialmente, ERNESTO
Pedro Ramos Matías.
1 comentario:
Realmente tenemos un motivo válido para celebrar, no un triunfo sobre un error de un gobierno mal asesorado y desesperado por mantener una imagen de "buen gobierno", sino celebramos que las comunidades que viven en las cercanias de la selva del Candamo y la vida que allí se alberga tendrán una oportunida más para seguir viviendo en paz.
Este triunfo también debe ser dedicado a las generaciones futuras que tendrán en la biodiversidad que allí se conserva una oportunidad de desarrollo sustentable; tal vez ellos sepan aprovechar los recursos de mejor manera que la hoy se practica, esperamos que ellos tengan otras fuentes de energía limpias y renovables.
En términos militares "la guerra no ha terminado"; pero la primera batalla si ha sido ganada.
Ojalá la votación en el gobierno Regional de Puno hubiera sido unánime, hubo tres votos en contra que nos indican que aún no hay unión en defensa de una causa justa.
sigamos en la lucha:
rolando Alfaro
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